LONDRES – Este es un momento complicado para ser un Estado, y un momento aún más complicado para ser ciudadano. El Estado-Nación, quien es el proveedor clásico de seguridad y bienestar básicos a cambio de la lealtad de los ciudadanos, está bajo amenaza –en el ámbito doméstico y como la unidad fundamental de los asuntos internacionales.
LONDRES – Este es un momento complicado para ser un Estado, y un momento aún más complicado para ser ciudadano. El Estado-Nación, quien es el proveedor clásico de seguridad y bienestar básicos a cambio de la lealtad de los ciudadanos, está bajo amenaza –en el ámbito doméstico y como la unidad fundamental de los asuntos internacionales.