NUEVA YORK – La decisión del presidente ruso Vladímir Putin de ordenar una invasión total de Ucrania va en contra de cualquier lógica política, incluso para un razonamiento tan autoritario como el suyo. Con su ataque no provocado, Putin se une a una larga lista de tiranos irracionales, entre los que se destaca Iósif Stalin, que creía que la conservación del poder le exigía su ampliación constante. Esta lógica llevó a Stalin a cometer atrocidades horrendas contra su propio pueblo, entre ellas provocar una hambruna que mató de hambre a millones de ucranianos.
NUEVA YORK – La decisión del presidente ruso Vladímir Putin de ordenar una invasión total de Ucrania va en contra de cualquier lógica política, incluso para un razonamiento tan autoritario como el suyo. Con su ataque no provocado, Putin se une a una larga lista de tiranos irracionales, entre los que se destaca Iósif Stalin, que creía que la conservación del poder le exigía su ampliación constante. Esta lógica llevó a Stalin a cometer atrocidades horrendas contra su propio pueblo, entre ellas provocar una hambruna que mató de hambre a millones de ucranianos.