Cuando Argentina dejó de tener acceso a los créditos a finales de 2001, el gobierno recurrió a medidas desesperadas en un vano intento por evitar el desastre. Los fondos de pensiones privatizados (creados en 1994 como resultado de una reforma a la seguridad social basada en cuentas individuales investidas en bonos y acciones) fueron una de las víctimas. El gobierno recalendarizó por la fuerza los títulos de deuda pública de esos fondos, conocidos localmente como AFJP. También "pesificó" esos títulos, que a mediados de 2001 ascendían a más del 60% del portafolio de los fondos de pensiones, convirtiendo de hecho los activos denominados en dólares a pesos locales de la noche a la mañana.
Cuando Argentina dejó de tener acceso a los créditos a finales de 2001, el gobierno recurrió a medidas desesperadas en un vano intento por evitar el desastre. Los fondos de pensiones privatizados (creados en 1994 como resultado de una reforma a la seguridad social basada en cuentas individuales investidas en bonos y acciones) fueron una de las víctimas. El gobierno recalendarizó por la fuerza los títulos de deuda pública de esos fondos, conocidos localmente como AFJP. También "pesificó" esos títulos, que a mediados de 2001 ascendían a más del 60% del portafolio de los fondos de pensiones, convirtiendo de hecho los activos denominados en dólares a pesos locales de la noche a la mañana.