BRIGHTON – Ser pobre es una experiencia sumamente vergonzosa que degrada la dignidad y la sensación de autoestima de la persona. Mientras que las manifestaciones y las causas de la pobreza difieren, la humillación que la acompaña es universal. Una investigación reciente realizada en la Universidad de Oxford determinó que desde China hasta el Reino Unido, las personas que enfrentan una penuria económica -inclusive los niños- experimentan un ataque casi idéntico contra su orgullo y autoestima.
BRIGHTON – Ser pobre es una experiencia sumamente vergonzosa que degrada la dignidad y la sensación de autoestima de la persona. Mientras que las manifestaciones y las causas de la pobreza difieren, la humillación que la acompaña es universal. Una investigación reciente realizada en la Universidad de Oxford determinó que desde China hasta el Reino Unido, las personas que enfrentan una penuria económica -inclusive los niños- experimentan un ataque casi idéntico contra su orgullo y autoestima.