JERUSALÉN – Mis padres y yo llegamos a Tel Aviv unos meses antes de que estallara la Segunda Guerra Mundial. El resto de nuestra familia extendida -tres de mis abuelos, los siete hermanos de mi madre y mis cinco primos- se quedaron en Polonia. Todos fueron asesinados en el Holocausto.
JERUSALÉN – Mis padres y yo llegamos a Tel Aviv unos meses antes de que estallara la Segunda Guerra Mundial. El resto de nuestra familia extendida -tres de mis abuelos, los siete hermanos de mi madre y mis cinco primos- se quedaron en Polonia. Todos fueron asesinados en el Holocausto.