NUEVA YORK – Ha pasado un mes desde que Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, declaró que asumía los poderes de la presidencia venezolana –actualmente en posesión de Nicolás Maduro–, y la crisis política en el país está lejos de terminar. La escalada de tensiones ha llegado a un punto en que la posibilidad de una guerra civil declarada –un escenario aparentemente inverosímil hace pocas semanas– es cada vez mayor. Al menos cuatro personas murieron y cientos resultaron heridas en choques violentos ocurridos en las fronteras de Venezuela el fin de semana pasado, cuando fuerzas del gobierno abrieron fuego contra opositores que intentaban entrar envíos de ayuda humanitaria al país.
NUEVA YORK – Ha pasado un mes desde que Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, declaró que asumía los poderes de la presidencia venezolana –actualmente en posesión de Nicolás Maduro–, y la crisis política en el país está lejos de terminar. La escalada de tensiones ha llegado a un punto en que la posibilidad de una guerra civil declarada –un escenario aparentemente inverosímil hace pocas semanas– es cada vez mayor. Al menos cuatro personas murieron y cientos resultaron heridas en choques violentos ocurridos en las fronteras de Venezuela el fin de semana pasado, cuando fuerzas del gobierno abrieron fuego contra opositores que intentaban entrar envíos de ayuda humanitaria al país.