ATENAS – La economía tiene un problema intratable con las mujeres. Las estudiantes de secundaria la evitan. Las universitarias la abandonan. Y es más profundo que la dificultad de atraer a suficientes mujeres a áreas como la matemática, la ciencia y la ingeniería. Incluso aquellas que llegaron a la cima de la disciplina, como Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo, consideran que los economistas son una «camarilla tribal» con modelos defectuosos.
ATENAS – La economía tiene un problema intratable con las mujeres. Las estudiantes de secundaria la evitan. Las universitarias la abandonan. Y es más profundo que la dificultad de atraer a suficientes mujeres a áreas como la matemática, la ciencia y la ingeniería. Incluso aquellas que llegaron a la cima de la disciplina, como Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo, consideran que los economistas son una «camarilla tribal» con modelos defectuosos.