PRINCETON – El azúcar es dulce, pero la ética de su producción es cualquier cosa menos atractiva. Un reciente informe, “Sugar Rush” (“La carrera en pos del azúcar”), hecho público por Oxfam Internacional, como parte de su campaña “Behind the Brands” (“Detrás de las marcas”), ha mostrado que nuestra utilización del azúcar nos compromete con apropiaciones de tierras que violan los derechos de algunas de las comunidades más pobres del mundo. Unos consumidores mejor informados y más éticos podrían cambiar esa situación.
PRINCETON – El azúcar es dulce, pero la ética de su producción es cualquier cosa menos atractiva. Un reciente informe, “Sugar Rush” (“La carrera en pos del azúcar”), hecho público por Oxfam Internacional, como parte de su campaña “Behind the Brands” (“Detrás de las marcas”), ha mostrado que nuestra utilización del azúcar nos compromete con apropiaciones de tierras que violan los derechos de algunas de las comunidades más pobres del mundo. Unos consumidores mejor informados y más éticos podrían cambiar esa situación.