RIO DE JANEIRO – Parece la trama de una película de terror – del tipo en la que un fallo muy poco notorio en la matriz amenaza con causar caos mundial. En esta oportunidad, fue un paso en falso en la programación, un paso simple pero fatal que de pronto hizo que la información más privada de millones de consumidores se torne en vulnerable frente a los ataques de los hackers. Los titulares de noticias advertían a gritos sobre los peligros en línea que apenas podíamos entender, alertando, a su vez, a enjambres de piratas digitales sobre la posibilidad de acceder a recompensas, si aprovechaban de estas nuevas oportunidades delictivas. Las empresas de todo el mundo se apresuraron a garantizar su seguridad en línea.
RIO DE JANEIRO – Parece la trama de una película de terror – del tipo en la que un fallo muy poco notorio en la matriz amenaza con causar caos mundial. En esta oportunidad, fue un paso en falso en la programación, un paso simple pero fatal que de pronto hizo que la información más privada de millones de consumidores se torne en vulnerable frente a los ataques de los hackers. Los titulares de noticias advertían a gritos sobre los peligros en línea que apenas podíamos entender, alertando, a su vez, a enjambres de piratas digitales sobre la posibilidad de acceder a recompensas, si aprovechaban de estas nuevas oportunidades delictivas. Las empresas de todo el mundo se apresuraron a garantizar su seguridad en línea.