MANILA/BANGKOK – Ya muy entrado el segundo año de la pandemia de COVID‑19, la reapertura segura de las escuelas se ha vuelto una prioridad urgente. Asistir a la escuela es crucial para las perspectivas educativas y de vida de los alumnos. El costo a largo plazo (individual y social) de mantener las escuelas cerradas es excesivo y no admite justificación en forma permanente.
MANILA/BANGKOK – Ya muy entrado el segundo año de la pandemia de COVID‑19, la reapertura segura de las escuelas se ha vuelto una prioridad urgente. Asistir a la escuela es crucial para las perspectivas educativas y de vida de los alumnos. El costo a largo plazo (individual y social) de mantener las escuelas cerradas es excesivo y no admite justificación en forma permanente.