KIEV - Hace dos años, cinco de los diez nuevos miembros de Europa del Este de la Unión Europea - los tres países bálticos, Hungría y Rumania - parecían devastados por la crisis financiera mundial. Se cernían sobre ellos el descontento social, enormes devaluaciones y protestas populistas.
KIEV - Hace dos años, cinco de los diez nuevos miembros de Europa del Este de la Unión Europea - los tres países bálticos, Hungría y Rumania - parecían devastados por la crisis financiera mundial. Se cernían sobre ellos el descontento social, enormes devaluaciones y protestas populistas.