NUEVA YORK – En diciembre de 2019, el banco central sueco abandonó una política de tasas de interés negativas que había mantenido durante casi cinco años. La tasa repo (a la cual presta a los bancos comerciales) del Riksbank, que llegó a ser de -0,5% en febrero de 2016, había subido a un 0% en enero. La última alza de la tasa se hizo a pesar de que la economía sueca se está ralentizando y la inflación está por debajo del objetivo.
NUEVA YORK – En diciembre de 2019, el banco central sueco abandonó una política de tasas de interés negativas que había mantenido durante casi cinco años. La tasa repo (a la cual presta a los bancos comerciales) del Riksbank, que llegó a ser de -0,5% en febrero de 2016, había subido a un 0% en enero. La última alza de la tasa se hizo a pesar de que la economía sueca se está ralentizando y la inflación está por debajo del objetivo.