CAMBRIDGE: Cuando Vicente Fox asuma la presidencia de México el 1 de diciembre, el país celebrará mucho más que un simple cambio de líder. Por primera vez en su historia, la nación está cerca de cuatro logros simultáneos: democracia real, prosperidad económica, cohesión social y buenas relaciones con los Estados Unidos (EU). El sentir general en México es palpable: hay grandes esperanzas de que el país escape de los demonios del pasado (inestabilidad, corrupción y enormes divisiones sociales) para convertirse en una sociedad dinámica construída en base a la fortaleza de culturas diversas, a la participación social y a un papel cada vez más importante en el mundo.
CAMBRIDGE: Cuando Vicente Fox asuma la presidencia de México el 1 de diciembre, el país celebrará mucho más que un simple cambio de líder. Por primera vez en su historia, la nación está cerca de cuatro logros simultáneos: democracia real, prosperidad económica, cohesión social y buenas relaciones con los Estados Unidos (EU). El sentir general en México es palpable: hay grandes esperanzas de que el país escape de los demonios del pasado (inestabilidad, corrupción y enormes divisiones sociales) para convertirse en una sociedad dinámica construída en base a la fortaleza de culturas diversas, a la participación social y a un papel cada vez más importante en el mundo.