BOSTON – La decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos de desestimar explícitamente la acción afirmativa basada en la raza en las admisiones universitarias ha intensificado los debates sobre el privilegio y la movilidad social en Estados Unidos. Las universidades de élite son centrales en estas cuestiones y la desilusión manifestada por muchos defensores de una mayor inclusividad y apertura en la educación superior es entendible. Pero también lo es el entusiasmo entre los norteamericanos de origen asiático, que han sido discriminados en el proceso de admisión en instituciones como la Universidad de Harvard.
BOSTON – La decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos de desestimar explícitamente la acción afirmativa basada en la raza en las admisiones universitarias ha intensificado los debates sobre el privilegio y la movilidad social en Estados Unidos. Las universidades de élite son centrales en estas cuestiones y la desilusión manifestada por muchos defensores de una mayor inclusividad y apertura en la educación superior es entendible. Pero también lo es el entusiasmo entre los norteamericanos de origen asiático, que han sido discriminados en el proceso de admisión en instituciones como la Universidad de Harvard.