NUEVA YORK – Tal vez ningún otro país del mundo –ni siquiera Iraq, Afganistán o Sudán—ha sufrido tanto por los conflictos armados durante los últimos quince años como la República Democrática del Congo. Varios millones de personas han muerto directamente en la lucha armada o por los desplazamientos forzosos y las consecuencias sobre la salud resultantes.
NUEVA YORK – Tal vez ningún otro país del mundo –ni siquiera Iraq, Afganistán o Sudán—ha sufrido tanto por los conflictos armados durante los últimos quince años como la República Democrática del Congo. Varios millones de personas han muerto directamente en la lucha armada o por los desplazamientos forzosos y las consecuencias sobre la salud resultantes.