MADRID – Un Estado fallido. En eso se ha convertido Libia a lo largo de la última década, pasando de protagonizar una de las llamadas “Primaveras Árabes” a sumirse en el invierno más severo. La caída del régimen autoritario de Muamar el Gadafi en 2011 no terminó de traer las mejoras en las condiciones sociales que algunos esperaban, sino que puso a los libios a merced del desgobierno y la miseria. Sin que el mundo haya reparado demasiado en ello, la guerra civil que lleva años hostigando a Libia corre el peligro de hacerse crónica.
MADRID – Un Estado fallido. En eso se ha convertido Libia a lo largo de la última década, pasando de protagonizar una de las llamadas “Primaveras Árabes” a sumirse en el invierno más severo. La caída del régimen autoritario de Muamar el Gadafi en 2011 no terminó de traer las mejoras en las condiciones sociales que algunos esperaban, sino que puso a los libios a merced del desgobierno y la miseria. Sin que el mundo haya reparado demasiado en ello, la guerra civil que lleva años hostigando a Libia corre el peligro de hacerse crónica.