LONDRES – Hace veinticinco años, junto con el primer ministro irlandés Bertie Ahern, el presidente norteamericano Bill Clinton y los líderes de los cuatro principales partidos políticos de Irlanda del Norte, presentamos lo que se dio en llamar el Acuerdo de Viernes Santo (GFA por su sigla en inglés). Ese pacto resolvió un conflicto que había causado miles de muertes y un dolor y una destrucción incalculables durante décadas, y hasta se podría decir siglos.
LONDRES – Hace veinticinco años, junto con el primer ministro irlandés Bertie Ahern, el presidente norteamericano Bill Clinton y los líderes de los cuatro principales partidos políticos de Irlanda del Norte, presentamos lo que se dio en llamar el Acuerdo de Viernes Santo (GFA por su sigla en inglés). Ese pacto resolvió un conflicto que había causado miles de muertes y un dolor y una destrucción incalculables durante décadas, y hasta se podría decir siglos.