Hoy en día, siguen llegando las malas noticias desde América Latina. Las condiciones económicas empeoran en casi todas partes, la cohesión social se debilita y crece la inestabilidad política. No es de sorprender, ya que gran parte de América Latina se pasó los últimos veinte años sin ir a ningún lado. Se vendieron los activos y las deudas nacionales se inflaron sin que se ganara casi nada duradero o benéfico. En verdad, estos fueron años que la plaga de langostas devoró.
Hoy en día, siguen llegando las malas noticias desde América Latina. Las condiciones económicas empeoran en casi todas partes, la cohesión social se debilita y crece la inestabilidad política. No es de sorprender, ya que gran parte de América Latina se pasó los últimos veinte años sin ir a ningún lado. Se vendieron los activos y las deudas nacionales se inflaron sin que se ganara casi nada duradero o benéfico. En verdad, estos fueron años que la plaga de langostas devoró.