La canciller Angela Merkel convirtió el tratamiento del cambio climático en una alta prioridad en la agenda de Alemania para sus presidencias de la UE y del G8, que comienzan en enero. He aquí una propuesta concreta, lo suficientemente general para que los líderes mundiales la consideren y la acepten, y lo suficientemente clara para que otros gobiernos y empresas la entiendan: nada más que fijar una fecha, en la próxima cumbre del G8, a partir de la cual los autos alimentados a petróleo ya no puedan circular más en los principales países industrializados.
La canciller Angela Merkel convirtió el tratamiento del cambio climático en una alta prioridad en la agenda de Alemania para sus presidencias de la UE y del G8, que comienzan en enero. He aquí una propuesta concreta, lo suficientemente general para que los líderes mundiales la consideren y la acepten, y lo suficientemente clara para que otros gobiernos y empresas la entiendan: nada más que fijar una fecha, en la próxima cumbre del G8, a partir de la cual los autos alimentados a petróleo ya no puedan circular más en los principales países industrializados.