TOKIO – Si usted escucha a los líderes estadounidenses, europeos o incluso los chinos, Japón es el futuro económico que nadie quiere. Al vender paquetes de estímulo masivos y rescates bancarios, los líderes occidentales dijeron a sus pueblos, “tenemos que hacer esto o acabaremos como Japón, atascado en una recesión y deflación durante una década o más.”
TOKIO – Si usted escucha a los líderes estadounidenses, europeos o incluso los chinos, Japón es el futuro económico que nadie quiere. Al vender paquetes de estímulo masivos y rescates bancarios, los líderes occidentales dijeron a sus pueblos, “tenemos que hacer esto o acabaremos como Japón, atascado en una recesión y deflación durante una década o más.”