BERKELEY – Antes de 2008 enseñaba a mis estudiantes que la economía de los Estados Unidos era flexible. Tenía empleadores dispuestos a arriesgarse y contratar trabajadores desempleados que serían productivos; y tenían empleados dispuestos a aprovechar la oportunidad, o intentar algo nuevo a fin de conseguir un empleo. Mientras los empleadores y trabajadores emprendedores se arriesgaran, la oferta crearía su propia demanda.
BERKELEY – Antes de 2008 enseñaba a mis estudiantes que la economía de los Estados Unidos era flexible. Tenía empleadores dispuestos a arriesgarse y contratar trabajadores desempleados que serían productivos; y tenían empleados dispuestos a aprovechar la oportunidad, o intentar algo nuevo a fin de conseguir un empleo. Mientras los empleadores y trabajadores emprendedores se arriesgaran, la oferta crearía su propia demanda.