MUNICH - En agosto, la crisis de balanza de pagos europea atravesó la periferia de la eurozona y comenzó a golpear a Italia. Los diferenciales de interés para bonos del gobierno italiano comenzaron a elevarse, la administración del primer ministro Silvio Berlusconi se alarmó lo suficiente como para poner en práctica un programa de austeridad, y el Banco Central Europeo contribuyó con liquidez adicional.
MUNICH - En agosto, la crisis de balanza de pagos europea atravesó la periferia de la eurozona y comenzó a golpear a Italia. Los diferenciales de interés para bonos del gobierno italiano comenzaron a elevarse, la administración del primer ministro Silvio Berlusconi se alarmó lo suficiente como para poner en práctica un programa de austeridad, y el Banco Central Europeo contribuyó con liquidez adicional.