CAMBRIDGE – El siglo XXI es testigo del retorno de Asia a lo que podrían considerarse sus proporciones históricas en cuanto a población y economía del mundo. En 1800, Asia representaba más de la mitad de la población y la producción global. Para 1900, representaba apenas el 20% de la producción mundial –no porque a Asia le hubiera sucedido algo malo, sino más bien porque la Revolución Industrial había transformado a Europa y Norteamérica en el taller del mundo.
CAMBRIDGE – El siglo XXI es testigo del retorno de Asia a lo que podrían considerarse sus proporciones históricas en cuanto a población y economía del mundo. En 1800, Asia representaba más de la mitad de la población y la producción global. Para 1900, representaba apenas el 20% de la producción mundial –no porque a Asia le hubiera sucedido algo malo, sino más bien porque la Revolución Industrial había transformado a Europa y Norteamérica en el taller del mundo.