GINEBRA – Desde la revolución agraria, el progreso tecnológico siempre ha alimentado fuerzas opuestas de dispersión y concentración. La primera ocurre con la erosión de viejos poderes y privilegios; la segunda, cuando se expande el poder y el alcance de quienes controlan las nuevas capacidades. La denominada Cuarta Revolución Industrial no será una excepción.
GINEBRA – Desde la revolución agraria, el progreso tecnológico siempre ha alimentado fuerzas opuestas de dispersión y concentración. La primera ocurre con la erosión de viejos poderes y privilegios; la segunda, cuando se expande el poder y el alcance de quienes controlan las nuevas capacidades. La denominada Cuarta Revolución Industrial no será una excepción.