NUEVA DELHI -- El nuevo presupuesto de la India para 2008-2009 refleja menos la salud financiera actual del país que la irresistible tendencia de los gobiernos indios a usar el presupuesto nacional como un arma preelectoral. Año con año la India lucha por conciliar lo irreconciliable: estimular el crecimiento económico y la inversión, aliviar la pobreza endémica y alimentar su voraz apetito militar. El gobierno quiere que se note que le interesa el “aam aadmi”, el hombre común (que vota), y satisfacer al mismo tiempo las necesidades de los empresarios (que mantienen funcionando la economía).
NUEVA DELHI -- El nuevo presupuesto de la India para 2008-2009 refleja menos la salud financiera actual del país que la irresistible tendencia de los gobiernos indios a usar el presupuesto nacional como un arma preelectoral. Año con año la India lucha por conciliar lo irreconciliable: estimular el crecimiento económico y la inversión, aliviar la pobreza endémica y alimentar su voraz apetito militar. El gobierno quiere que se note que le interesa el “aam aadmi”, el hombre común (que vota), y satisfacer al mismo tiempo las necesidades de los empresarios (que mantienen funcionando la economía).