LONDRES – El movimiento democrático en Hong Kong ha ganado admiración en todo el mundo. Los principios, la decencia y la conducta de su vanguardia joven inspiran confianza en las cualidades de una generación que algún día gobernará la gran ciudad. Dicho eso, ya es hora de avanzar con inteligencia hacia la etapa final.
LONDRES – El movimiento democrático en Hong Kong ha ganado admiración en todo el mundo. Los principios, la decencia y la conducta de su vanguardia joven inspiran confianza en las cualidades de una generación que algún día gobernará la gran ciudad. Dicho eso, ya es hora de avanzar con inteligencia hacia la etapa final.