CHICAGO – Cuando una empresa rentable se encuentra con un gran pasivo, la solución no es la de que el Gobierno compre sus activos a precios desorbitados. Al contrario: la solución es la protección con arreglo a la legislación sobre las quiebras, que en los Estados Unidos corresponde al capítulo 11 de ésta.
CHICAGO – Cuando una empresa rentable se encuentra con un gran pasivo, la solución no es la de que el Gobierno compre sus activos a precios desorbitados. Al contrario: la solución es la protección con arreglo a la legislación sobre las quiebras, que en los Estados Unidos corresponde al capítulo 11 de ésta.