CIUDAD DE MÉXICO – Gustavo Petro, un veterano político de izquierda y exguerrillero, es el próximo presidente electo de Colombia, tras derrotar a su oponente (el excéntrico populista de derecha Rodolfo Hernández Suárez) por un margen pequeño pero incuestionable. Con eso, uno de los países más conservadores de América Latina se une, finalmente, a la lista de los que desde 1998 han dado (y luego quitado) la presidencia a líderes autoproclamados «progresistas»; a veces acompañada de mayoría legislativa, muchas veces sin ella.
CIUDAD DE MÉXICO – Gustavo Petro, un veterano político de izquierda y exguerrillero, es el próximo presidente electo de Colombia, tras derrotar a su oponente (el excéntrico populista de derecha Rodolfo Hernández Suárez) por un margen pequeño pero incuestionable. Con eso, uno de los países más conservadores de América Latina se une, finalmente, a la lista de los que desde 1998 han dado (y luego quitado) la presidencia a líderes autoproclamados «progresistas»; a veces acompañada de mayoría legislativa, muchas veces sin ella.