LONDRES – cuando el ex presidente checo, Václav Havel, tocó a la puerta de la embajada china en Praga para exigir la liberación del escritor, Liu Xiaobo, tuve una espeluznante sensación de déjà vu. Hace 33 años, Havel había ayudado a iniciar la Carta 77, el documento histórico que cristalizó los ideales de todos los disidentes –y muchos otros- atrapados detrás de la Cortina de Hierro.
LONDRES – cuando el ex presidente checo, Václav Havel, tocó a la puerta de la embajada china en Praga para exigir la liberación del escritor, Liu Xiaobo, tuve una espeluznante sensación de déjà vu. Hace 33 años, Havel había ayudado a iniciar la Carta 77, el documento histórico que cristalizó los ideales de todos los disidentes –y muchos otros- atrapados detrás de la Cortina de Hierro.