OXFORD – El COVID-19 ha ofrecido algunas lecciones duras pero útiles sobre gobernanza. Muchos países ricos no manejaron la crisis tan bien como se anticipaba, mientras que muchos países más pobres, poblados y vulnerables superaron las expectativas. La diferencia plantea interrogantes importantes no sólo sobre la gestión de la salud pública, sino también sobre el estado de gobernanza en las democracias más grandes y más antiguas del mundo.
OXFORD – El COVID-19 ha ofrecido algunas lecciones duras pero útiles sobre gobernanza. Muchos países ricos no manejaron la crisis tan bien como se anticipaba, mientras que muchos países más pobres, poblados y vulnerables superaron las expectativas. La diferencia plantea interrogantes importantes no sólo sobre la gestión de la salud pública, sino también sobre el estado de gobernanza en las democracias más grandes y más antiguas del mundo.