BERKELEY – El juicio antimonopolio contra Google finalmente ha revelado lo que el motor de búsqueda dominante del mundo está dispuesto a pagar -y puede pagar- para ser la opción predeterminada en los teléfonos inteligentes y otros dispositivos: 26.000 millones de dólares solo en 2001, 18.000 millones de los cuales fueron a manos de otro gigante tecnológico, Apple. Si bien Google ha intentado ocultar esta cifra durante mucho tiempo, siempre se supo que era grande -y, efectivamente, lo es.
BERKELEY – El juicio antimonopolio contra Google finalmente ha revelado lo que el motor de búsqueda dominante del mundo está dispuesto a pagar -y puede pagar- para ser la opción predeterminada en los teléfonos inteligentes y otros dispositivos: 26.000 millones de dólares solo en 2001, 18.000 millones de los cuales fueron a manos de otro gigante tecnológico, Apple. Si bien Google ha intentado ocultar esta cifra durante mucho tiempo, siempre se supo que era grande -y, efectivamente, lo es.