BERLÍN – El resultado de las elecciones federales alemanas del domingo fue inesperado y preocupante, al menos para los estándares del país. Los dos partidos principales, el Socialdemócrata (SPD) y la Unión Demócrata Cristiana (CDU), junto a su partido hermano bávaro, la Unión Social Cristiana (CSU), recibieron el castigo de las urnas después de haber gobernado durante los últimos cuatro años como una gran coalición liderada por la canciller Ángela Merkel.
BERLÍN – El resultado de las elecciones federales alemanas del domingo fue inesperado y preocupante, al menos para los estándares del país. Los dos partidos principales, el Socialdemócrata (SPD) y la Unión Demócrata Cristiana (CDU), junto a su partido hermano bávaro, la Unión Social Cristiana (CSU), recibieron el castigo de las urnas después de haber gobernado durante los últimos cuatro años como una gran coalición liderada por la canciller Ángela Merkel.