LONDRES – Una de las lamentables consecuencias de El origen de las especies de Charles Darwin fue el advenimiento de la pseudociencia conocida como geopolítica. Inspirándose en los conceptos de Darwin de “selección natural” y “supervivencia del más apto”, los progenitores de la geopolítica sostuvieron que toda la historia estaba moldeada por una competitiva “lucha de naciones”. Este abordaje, que contrastaba con la visión armoniosa de las relaciones internacionales defendida por los pensadores de la Ilustración y los economistas clásicos, veía a todos los países como depredadores potenciales, y a larga, a los países más exitosos, sometiendo al resto.
LONDRES – Una de las lamentables consecuencias de El origen de las especies de Charles Darwin fue el advenimiento de la pseudociencia conocida como geopolítica. Inspirándose en los conceptos de Darwin de “selección natural” y “supervivencia del más apto”, los progenitores de la geopolítica sostuvieron que toda la historia estaba moldeada por una competitiva “lucha de naciones”. Este abordaje, que contrastaba con la visión armoniosa de las relaciones internacionales defendida por los pensadores de la Ilustración y los economistas clásicos, veía a todos los países como depredadores potenciales, y a larga, a los países más exitosos, sometiendo al resto.