PARÍS – El aspecto de "juegos del hambre" de este ciclo electoral francés comenzó en la izquierda. El presidente François Hollande fue aniquilado por su propio Partido Socialista. El primer ministro de Hollande, Manuel Valls, se convirtió en el segundo plato en el banquete de los caníbales.
PARÍS – El aspecto de "juegos del hambre" de este ciclo electoral francés comenzó en la izquierda. El presidente François Hollande fue aniquilado por su propio Partido Socialista. El primer ministro de Hollande, Manuel Valls, se convirtió en el segundo plato en el banquete de los caníbales.