¿Deberíamos observar la campaña presidencial francesa con admiración, o alarma? ¿O tal vez con un poco de ambas? Es innegable que se trata de un gran "show" con todos los ingredientes de un éxito de Hollywood, e incluso con un giro sorpresivo en la trama: el surgimiento de un "Tercer hombre", François Bayrou.
¿Deberíamos observar la campaña presidencial francesa con admiración, o alarma? ¿O tal vez con un poco de ambas? Es innegable que se trata de un gran "show" con todos los ingredientes de un éxito de Hollywood, e incluso con un giro sorpresivo en la trama: el surgimiento de un "Tercer hombre", François Bayrou.