MELBOURNE – El derecho a recibir ayuda para morir sigue ganando terreno. El mes pasado, el parlamento español aprobó una ley (que entrará en vigor en junio) que permitirá a los médicos ayudar a morir a pacientes adultos que tengan una enfermedad «grave e incurable» que les cause un «sufrimiento intolerable». Los médicos podrán recetar una dosis letal de una droga que el paciente se autoadministrará (lo que se conoce, entre otros nombres, como muerte con ayuda médica, muerte asistida voluntaria y suicidio asistido) o administrarle una inyección letal (eutanasia voluntaria).
MELBOURNE – El derecho a recibir ayuda para morir sigue ganando terreno. El mes pasado, el parlamento español aprobó una ley (que entrará en vigor en junio) que permitirá a los médicos ayudar a morir a pacientes adultos que tengan una enfermedad «grave e incurable» que les cause un «sufrimiento intolerable». Los médicos podrán recetar una dosis letal de una droga que el paciente se autoadministrará (lo que se conoce, entre otros nombres, como muerte con ayuda médica, muerte asistida voluntaria y suicidio asistido) o administrarle una inyección letal (eutanasia voluntaria).