MÚNICH – Golpeada por la pandemia del COVID-19 y la guerra en Ucrania, la Unión Europea necesita dinero. Y dado que Paolo Gentiloni, el comisionado de Asuntos Económicos del bloque, no puede conseguirlo directamente de los estados miembro de la UE, tiene que pedirlo prestado. El propósito parece no importar. Lo que importa es que la Comisión reciba dinero -en grandes cantidades-, aunque eso signifique acumular una montaña de deuda.
MÚNICH – Golpeada por la pandemia del COVID-19 y la guerra en Ucrania, la Unión Europea necesita dinero. Y dado que Paolo Gentiloni, el comisionado de Asuntos Económicos del bloque, no puede conseguirlo directamente de los estados miembro de la UE, tiene que pedirlo prestado. El propósito parece no importar. Lo que importa es que la Comisión reciba dinero -en grandes cantidades-, aunque eso signifique acumular una montaña de deuda.