LONDRES – La elección del mes pasado para el Parlamento Europeo tuvo resultados mejores que los que uno hubiera esperado, y fue por una sencilla razón: la mayoría silenciosa proeuropea habló. Su mensaje fue que quiere preservar los valores fundacionales de la Unión Europea; pero también quiere cambios radicales en su funcionamiento. Su principal inquietud es el cambio climático.
LONDRES – La elección del mes pasado para el Parlamento Europeo tuvo resultados mejores que los que uno hubiera esperado, y fue por una sencilla razón: la mayoría silenciosa proeuropea habló. Su mensaje fue que quiere preservar los valores fundacionales de la Unión Europea; pero también quiere cambios radicales en su funcionamiento. Su principal inquietud es el cambio climático.