Hablando acerca de la desintegración de Yugoslavia en 1991, el ex Presidente del Consejo de la UE Jacques Poos hizo su famosa pero hoy extemporánea afirmación: "Esta es la hora de Europa.... no la de los estadounidenses". Lo que la UE aprendió de los cuatro años subsiguientes de desastres en los Balcanes bajo su gestión está siendo sometido a prueba hoy por otra encrucijada importante y crisis potencial: cuándo y cómo Kosovo se ha de independizar. Una vez más, el papel de Europa puede ser decisivo.
Hablando acerca de la desintegración de Yugoslavia en 1991, el ex Presidente del Consejo de la UE Jacques Poos hizo su famosa pero hoy extemporánea afirmación: "Esta es la hora de Europa.... no la de los estadounidenses". Lo que la UE aprendió de los cuatro años subsiguientes de desastres en los Balcanes bajo su gestión está siendo sometido a prueba hoy por otra encrucijada importante y crisis potencial: cuándo y cómo Kosovo se ha de independizar. Una vez más, el papel de Europa puede ser decisivo.