MILAN – "Nunca confesar un fracaso. Siempre que se esté a punto de no lograr un objetivo, simplemente postergar el plazo. Tarde o temprano, se logrará". Esta sencilla regla, que se usó ampliamente en Europa del Este en los días del socialismo, es también popular entre los burócratas de la Unión Europea en Bruselas hoy en día.
MILAN – "Nunca confesar un fracaso. Siempre que se esté a punto de no lograr un objetivo, simplemente postergar el plazo. Tarde o temprano, se logrará". Esta sencilla regla, que se usó ampliamente en Europa del Este en los días del socialismo, es también popular entre los burócratas de la Unión Europea en Bruselas hoy en día.