MADRID – La crisis financiera mundial, que comenzó hace ahora diez años, puso de manifiesto que la supervivencia a largo plazo del orden internacional propugnado por occidente no es inexorable. Hoy, se asume que si Estados Unidos pierde su puesto de potencia hegemónica en ese orden internacional, China se abrirá camino como nuevo líder mundial. Pero ¿cómo sería el orden mundial liderado por China?
MADRID – La crisis financiera mundial, que comenzó hace ahora diez años, puso de manifiesto que la supervivencia a largo plazo del orden internacional propugnado por occidente no es inexorable. Hoy, se asume que si Estados Unidos pierde su puesto de potencia hegemónica en ese orden internacional, China se abrirá camino como nuevo líder mundial. Pero ¿cómo sería el orden mundial liderado por China?