MADRID – En un contexto de crecientes tensiones geopolíticas y con las elecciones del Parlamento Europeo a la vuelta de la esquina, ha pasado casi inadvertida la reciente -y ajustada- aprobación delPacto sobre Migración y Asilo de la Unión Europea. Cabe destacar que el interés del acuerdo reside más en el mero hecho de haberse aprobado que en cualquiera de sus cláusulas concretas. Simboliza la culminación de una década de esfuerzos para reformar el «sistema de Dublín» de gestión migratoria en la UE.
MADRID – En un contexto de crecientes tensiones geopolíticas y con las elecciones del Parlamento Europeo a la vuelta de la esquina, ha pasado casi inadvertida la reciente -y ajustada- aprobación del Pacto sobre Migración y Asilo de la Unión Europea. Cabe destacar que el interés del acuerdo reside más en el mero hecho de haberse aprobado que en cualquiera de sus cláusulas concretas. Simboliza la culminación de una década de esfuerzos para reformar el «sistema de Dublín» de gestión migratoria en la UE.