GENEVA – Desde que se promulgó la Política Nacional de Educación 2020, la India ha buscado posicionarse como un centro de conocimiento del siglo XXI con instituciones de educación superior globalmente competitivas. Pero la abrupta renuncia de un joven economista de una de las universidades más prestigiosas del país, y la subsiguiente revuelta en el campus por su salida, arrojan dudas sobre la capacidad de la India para hacer realidad esta ambición.
GENEVA – Desde que se promulgó la Política Nacional de Educación 2020, la India ha buscado posicionarse como un centro de conocimiento del siglo XXI con instituciones de educación superior globalmente competitivas. Pero la abrupta renuncia de un joven economista de una de las universidades más prestigiosas del país, y la subsiguiente revuelta en el campus por su salida, arrojan dudas sobre la capacidad de la India para hacer realidad esta ambición.