FREETOWN – A comienzos de este mes, mi hermana mayor se graduó de la facultad de leyes. Al completar su educación a los 44 años, es una inspiración no sólo para sus hijos pequeños, que la vieron recibir su diploma, sino también para mí, como ministro de Educación de Sierra Leona. Demasiadas mujeres y niñas han quedado marginadas del sistema educativo. Cada una de ellas –no importa ni su edad ni su contexto- merece la oportunidad de aprender.
FREETOWN – A comienzos de este mes, mi hermana mayor se graduó de la facultad de leyes. Al completar su educación a los 44 años, es una inspiración no sólo para sus hijos pequeños, que la vieron recibir su diploma, sino también para mí, como ministro de Educación de Sierra Leona. Demasiadas mujeres y niñas han quedado marginadas del sistema educativo. Cada una de ellas –no importa ni su edad ni su contexto- merece la oportunidad de aprender.