LONDRES – Desde la computación en la nube hasta la inteligencia artificial, la tecnología está revolucionando el funcionamiento de la economía global. Mientras estos cambios están generando grandes beneficios en las economías avanzadas, el mundo en desarrollo corre el riesgo de quedar rezagado. Para mejorar las perspectivas económicas del sur global y evitar que aumenten las desigualdades, las regiones en desarrollo deben tomar muy en serio las implicaciones de estos cambios para sus economías, y para el lugar que sus países ocuparán en la economía mundial.
LONDRES – Desde la computación en la nube hasta la inteligencia artificial, la tecnología está revolucionando el funcionamiento de la economía global. Mientras estos cambios están generando grandes beneficios en las economías avanzadas, el mundo en desarrollo corre el riesgo de quedar rezagado. Para mejorar las perspectivas económicas del sur global y evitar que aumenten las desigualdades, las regiones en desarrollo deben tomar muy en serio las implicaciones de estos cambios para sus economías, y para el lugar que sus países ocuparán en la economía mundial.