PARÍS – Durante la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, celebrada en Beijing en 1995, los participantes prometieron promover los derechos de las mujeres y las niñas a lo largo y ancho del mundo. Una parte de esa promesa, establecida en la histórica Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, fue garantizar la educación de todas las niñas. Un reciente estudio, el Informe de la UNESCO de Seguimiento de la Educación Para Todos en el Mundo, examina si se cumplió o no dicha promesa.
PARÍS – Durante la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, celebrada en Beijing en 1995, los participantes prometieron promover los derechos de las mujeres y las niñas a lo largo y ancho del mundo. Una parte de esa promesa, establecida en la histórica Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, fue garantizar la educación de todas las niñas. Un reciente estudio, el Informe de la UNESCO de Seguimiento de la Educación Para Todos en el Mundo, examina si se cumplió o no dicha promesa.