MILÁN – Los italianos y otros europeos tienen serios problemas para enfrentar sus propias deudas nacionales, pública y privada, por lo que puede parecer presuntuoso que uno de ellos hable del grave y creciente problema de la deuda de los Estados Unidos. No obstante, en la actualidad las realidades fiscales a ambos lados del Atlántico son muy similares, y sólo la persistente confianza en la promesa de EE.UU. mantiene viva la expectativa de muchos europeos de que algún gran golpe de efecto solucione la nefasta situación de endeudamiento.
MILÁN – Los italianos y otros europeos tienen serios problemas para enfrentar sus propias deudas nacionales, pública y privada, por lo que puede parecer presuntuoso que uno de ellos hable del grave y creciente problema de la deuda de los Estados Unidos. No obstante, en la actualidad las realidades fiscales a ambos lados del Atlántico son muy similares, y sólo la persistente confianza en la promesa de EE.UU. mantiene viva la expectativa de muchos europeos de que algún gran golpe de efecto solucione la nefasta situación de endeudamiento.