LONDRES.– Finalmente se tiene conciencia de la gravedad de la crisis en la eurozona. Los riesgos son extremos. Los gobiernos y las instituciones financieras internacionales a duras penas lograron presentar una solución en medio de restricciones políticas y económicas extremadamente severas. Todavía quedan muchas preguntas por responder sobre su diseño; la implementación será al menos tan difícil como lo fue producir esa propuesta.
LONDRES.– Finalmente se tiene conciencia de la gravedad de la crisis en la eurozona. Los riesgos son extremos. Los gobiernos y las instituciones financieras internacionales a duras penas lograron presentar una solución en medio de restricciones políticas y económicas extremadamente severas. Todavía quedan muchas preguntas por responder sobre su diseño; la implementación será al menos tan difícil como lo fue producir esa propuesta.