NUEVA YORK – Cuando hay una pandemia, los líderes del mundo y los servicios de emergencias de salud deben adaptarse rápidamente a la amenaza en ciernes. A menudo, el último factor que consideran —si es que en algún momento llega a formar parte de sus listas— es el género.
NUEVA YORK – Cuando hay una pandemia, los líderes del mundo y los servicios de emergencias de salud deben adaptarse rápidamente a la amenaza en ciernes. A menudo, el último factor que consideran —si es que en algún momento llega a formar parte de sus listas— es el género.