WASHINGTON, DC – La crisis de la COVID‑19 pone la solidaridad humana ante una prueba inédita. ¿Aceptarán los ricos (o de hecho, todas las personas con ingresos estables o colchones de ahorro) medidas de apoyo para los pobres y económicamente inseguros? ¿Aceptarán los jóvenes (cuya tasa de mortandad es menor) hacer sacrificios para proteger a los viejos? ¿Aceptarán los habitantes de países ricos transferencias de recursos a los países pobres?
WASHINGTON, DC – La crisis de la COVID‑19 pone la solidaridad humana ante una prueba inédita. ¿Aceptarán los ricos (o de hecho, todas las personas con ingresos estables o colchones de ahorro) medidas de apoyo para los pobres y económicamente inseguros? ¿Aceptarán los jóvenes (cuya tasa de mortandad es menor) hacer sacrificios para proteger a los viejos? ¿Aceptarán los habitantes de países ricos transferencias de recursos a los países pobres?